Ser Femenina
¿Te preocupa tu salud y tu línea pero te aburre someterte a largas sesiones de gimnasia en el gimnasio o en tú casa? Quizás el patinaje pueda ser la solución a este problema. Muchas mujeres están empezando a descubrir en este deporte un divertido entretenimiento que no solo ayuda a moldear el cuerpo sino que también proporciona diversión en solitario o en compañía de amigas.
Y si le encuentras el gusto a patinar, entonces tienes que probar el Roller Derby. Se trata de un deporte de equipo que está causando furor, sobre todo entre mujeres, en todas partes del mundo. Cada vez son más las aficionadas que practican un deporte que no solo les produce un gran efecto beneficioso para el cuerpo, sino que también amplía las relaciones sociales.
Arrasa entre las mujeres
Curiosamente el Roller Derby es una afición que no parece muy femenina a primera vista, ya que se trata de un deporte de contacto donde hay muchos empujones y bloqueos. Se juega en una pista circular y cada equipo consta de cinco componentes. Básicamente cuatro de ellas tratarán de cerrar el paso a las rivales y a la vez abrir camino a su marcadora.
La marcadora debe de atravesar el grueso del grupo para poder marcar un punto para su equipo. Evidentemente para evitar que pasen las contrarias en el Roller Derby se recurrirá a todo tipo de tácticas para hacer caer a las contrarias. Es por eso que se juega con protecciones y, aunque en Estados Unidos suelen ser más violentas, en el resto de países el desarrollo es más pacífico.
Un deporte para chicas guerreras y algo punk
Alrededor de este deporte se ha creado una estética propia, agresiva, basada en medias rotas, faldas muy cortas, prendas provocativas y con ciertos aires punk. La música más rockera predomina en los encuentros y no hay lugar para “chicas blandas” en el Roller Derby.
En algunos casos su imagen puede resultar de un feminismo demasiado radical o agresivo, pero en la mayoría de los grupos es solo una forma más de divertirse con descaro y soltar a esa “riot girl” que llevamos dentro de nosotras. Por eso mismo las rivalidades rara vez prevalecen una vez terminado el encuentro.
